
Ayer se publicó un artículo en el diario Digital de Expansión sobre los motivos por el que un bufete necesita a un detective privado. Es algo que ya sabemos, pero noticias como esta dan un empujoncito a que nuestra profesión sea más conocida y se tome conciencia de lo útil que puede resultar la prueba del detective en un procedimiento judicial.
Los detectives privados podemos actuar en una amplia variedad de situaciones. No sólo prestamos servicios de investigación privada a particulares y empresas, sino que también contamos con la contratación de profesionales del derecho. Hoy es incuestionable la ayuda que podemos prestar a los despachos de abogados en cualquier tema que éstos se encuentren llevando a cabo.
Según esta noticia, los asuntos que más investigamos los detectives por encargo de los despachos de abogados son “las Infracciones en el ámbito laboral, seguros, informes económicos o patrimoniales, ‘forensic’ y conflictos conyugales”. Concretamente, en Detectives Grupo 2 colaboramos intensamente con diversos despachos llevando sobre todo asuntos relacionados con conflictos familiares (aquellos que están relacionados con la manutención y desatención a los hijos), temas de patentes y marcas, y laborales.
Hay personas que se cuestionan la validez de los informes del detective privado. Ante esto comentar que nuestra profesión está legalmente reconocida y regulada por la Ley 5/2014 de 4 de abril, de Seguridad Privada. En la noticia de Expansión, María Jesús Herrera, socia del bufete Sagardoy, dice:
“la validez de la prueba de detective en juicio es la de una prueba testifical y es un medio completamente eficaz siempre que esté bien articulado y sin transgredir derechos fundamentales, por lo que sirve a efectos probatorios y acreditativos en juicio”.
Asimismo, Luis Zarraluqui, presidente del bufete Zarraluqui Abogados de Familia, añade que “la eficacia probatoria de los informes de detectives se ha incrementado desde la entrada en vigor de la Ley de Enjuiciamiento Civil en 2000, que reconoce, además de los informes periciales, los elaborados por detectives”.
La noticia a la que hacemos referencia hoy termina realizando un repaso sobre los diferentes servicios en los que los despachos de abogados pueden necesitar de un detective privado.
Derecho de familia
Los problemas en el seno de las familias, tanto entre parejas como un control parental, siguen siendo los casos más habituales en los que un despacho especialista en derecho familiar recurre a un investigador privado: infidelidades, informes personales, seguimientos, delincuencia juvenil, etcétera, cuando hay demandas de divorcio o disputa judicial por la custodia de los hijos. Zarraluqui asegura que “también ha aumentado la verificación de uniones postmatrimoniales de los beneficiarios de pensiones compensatorias y averiguaciones patrimoniales y de ingresos de cónyuges “.
Ámbito laboral
Las averiguaciones relacionadas con el mundo del trabajo son frecuentes en las áreas de Laboral de los despachos, que recurren a detectives directa o indirectamente a través de la empresa: absentismo, bajas fingidas, competencia desleal… Enrique Ceca, socio de Ceca Magán, admite que “el despacho usa detectives para muchos casos relacionados con falsas bajas. Por ejemplo los empleados usan ese tiempo para fines personales, realizan actividades incompatibles con sus dolencias y hay otros trabajadores que pedían vacaciones y al denegárselas, fingían una baja y se marchaban a disfrutar de los días de descanso. También se investiga el uso fraudulento de los medios informáticos”.
Seguros
Otro ámbito en el que también se precisan los detectives es el relacionado con seguros. Luis Alfonso Fernández, socio del área de seguros de Hogan Lovells, explica que “en su mayoría, la firma recomienda a su cliente contratar a un detective, más que hacerlo el bufete, y le sugerimos nombres. Son esenciales para tratar de probar fraudes a las aseguradoras, Se ha incrementado su uso en los últimos años, y algunas empresas de detectives se han sofisticado y también realizan investigaciones patrimoniales y forensic”.
Aval judicial
El uso de detectives privados para descubrir a empleados mentirosos tiene respaldo judicial. Una sentencia del TSJ de Madrid dictada en 2013 avaló que una empresa contratara un detective privado por sospechas de una falsa baja médica de un trabajador. Éste fue sorprendido en el jardín de su casa con tareas de albañilería y bricolaje, cargando herramientas, conduciendo su coche, y llevando bolsas con compras en ambas manos, a pesar de que su supuesta lesión era en un brazo. Tanto el juzgado de instancia como el TSJ avalaron su despido procedente, rechazando la violación del derecho a la intimidad.
FUENTE: EXPANSIÓN, 19/04/2015. Puedes leer la noticia completa haciendo click en el siguiente enlace (Ver artículo).